El niño del pelo pincho, recientemente reciclado a "pelito repeinado y gomina" por consejos del entorno y asesores Florentinianos, no da una en los partidos del Madrid.A los madridistas no les importa que el portugues sólo vea el gol por medio del balón parado. Los diferentes colegiados emplean como método la "falta regalada" para sumar goles al marcador de los blancos. Eso no es problema para una afición blanca carente de escrúpulos...pero es que ya ni por esas. En el último encuentro, el niño no aprovechó a marcar una sóla de las tres "faltas-regalo"concedidas por el árbitro. Y sobre el resto de exigencias del partido, su ya habitual falta de recursos volvió a hacerse patente.
La prensa blanca habla hoy del peor partido del portugues en liga...y lo llama individualista. Luego sacan a relucir a la "ansiedad" como pretexto de tanto desacierto e incompetencia. La ansiedad puede venirle por los 8 goles que le saca Messi...o quizás la culpa esté en las botas.., pues el luso se las cambió en el descanso, demostrando que la incultura y la superstición van siempre de la mano. El vestuario sin duda arrastra malestar por los aspavientos y protestas de Cristiano, que se encara con sus propios compañeros para culparlos continuamente de sus propias carencias.
El club se acordará mucho tiempo de los 94 millones de euros...
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