La cadena Cope filtró anoche una incipiente estrategia del Real Madrid para desprestigiar a dos de sus rivales directos: Valencia y Barcelona.
Tan solo han pasado unos dias desde que el conjunto culé superó un control antidopaje de la UEFA, pero eso no importa. La institución blanca vive una situación desesperada tras los brutales desembolsos económicos recientes y la ausencia de títulos, todo ello disimulado por medio de una falsa imagen de tranquilidad interna y con intervenciones del Ministerio de Industria destinadas a suavizar el agujero financiero de un solo conjunto nacional en tiempos de crisis.
Este desbarajuste global ha situado al Madrid en una dificil tesitura, y las malas artes se han descubierto como su única estrategia de competición, al fracasar las armas deportivas.
Ante las informaciones que han apuntado a una futura campaña del Madrid para vincular al Barcelona y al Valencia con el dopaje, los blancos han callado. El periodista Juan Antonio Alcalá ha pedido disculpas por sus palabras...pero está claro que las insinuaciones parten de una fuente real en el seno de la directiva madridista.
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