El Barça Regal se puso a ocho puntos durante el segundo cuarto (24-16), y el Madrid logró empatarle a 24 mediante una serie de decisiones arbitrales a su favor, incluido un tiro libre sacado de la manga, y culminando la farsa con pasos para Navarro.
Antes de esa ráfaga arbitral ya habíamos visto codazos impunes, triples convertidos en canasta de dos...y el público rugiendo para protestar las artimañas madriles. Eso si...no se escuchaba ni un solo "Put... Real Madrid"...sino a lo sumo "madridista el que no bote" en su versión catalana. Lección de clase.
El Madrid se venía arriba, pero un parcial de 9-0 ponía el 35-30 en el marcador, otra vez por encima los culés. Acababa el segundo cuarto con 39-34, manteniendo los cinco de diferencia.
En el tercer cuarto, el Barcelona alcanzaba los nueve de diferencia tras un parcial de 8-0, lo lograba de manos de Mickeal, que anotaba dos tiros libres mientras los locutores frustrados comentaban la cara de pocos amigos del jugador culé. El arbitraje impedía una mayor diferencia pitando pasos, pero acababa este cuarto con la misma diferencia de nueve.
El último cuarto fue especialmente disputado. Finalmente se lo llevó el Barça Regal por 73-69. La venganza de Mickeal se forjó sin entrar al trapo, con el deporte y la elegancia de los virtuosos.
La cara de pocker de los locutores a pie de cancha era un poema....Liga Endesa para el rival...
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