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lunes, 19 de abril de 2010

La historia de lo determinado

A lo ya escrito, a lo ya decidido y acordado, a eso estamos asistiendo. ¿Nadie se pregunta como puede ser que un equipo sin peso en Europa no pierda un partido en su liga nacional?...Hablamos del Madrid, obviamente.
El Barcelona está pasando por un momento único en su historia y ha escrito el capítulo más grande en el fútbol a nivel internacional...¿Pero pierde la liga de su pais?.
Es de verguenza, de escándalo, y con el patrocinio de los poderes mediáticos divisamos con pasmo al desenlace de una conquista ya fraguada de antemano. El Real Madrid vive, parece ser, el mejor momento en su caminar por las ligas españolas. Ni siquiera el Madrid de las champions de Florentino cosechaba tal manojo de victorias enlazadas. Una imbatibilidad sin duda propia de un equipo llamado a encumbrarse en los altares de las competiciones internacionales...Sin embargo, Roma, Liverpool y Lyon dejaron en muy mal lugar esa imágen artificiosa que nos vienen a imponer de fronteras para adentro. ¿Que está ocurriendo?
Todos los que dispongais de criterio, raciocinio y capacidad de discernimiento, vereis cada jornada con asombro un arbitraje descaradamente decantado. Nadie puede hacerle contragolpes al Madrid, porque un agarrón suyo te detiene y te quedas con cara de bobo cuando el colegiado de turno dice que te levantes. Lo mismo con cada fuera de juego. De los codazos, agarrones, zarandeos y hasta ser arrojado fuera del campo (como hace Ramos) mejor no hablar.
En el lado contrario, la situación cambia: Tocar a un madridista cuando contragolpea es penado con tarjeta....y a la mínima de cambio es expulsión.
A los blancos se les permite encararse incluso con asistentes y árbitros...al equipo contrario se le advierte o se le sanciona directamente si se atreve a subir el tono o mirar a un linier.

El Barcelona ha logrado en estos ultimos tiempos un efecto letal sobre el contrario...La posesión del balón, el dominio del juego, la recuperación continuada, sumían al contrario en una situación psicológica de desánimo y frustración...y el partido se decantaba hacia el lado culé.
El Madrid consigue el mismo efecto sin juego, por medio del arbitraje. El equipo que decida salir con ganas a encarar a los blancos, es aburrido, frustrado y coaccionado por el trencilla de turno, hasta que el juego se arrincona, y el Madrid a base de llegar acierta.
Y no hablemos de romperle al Barcelona su racha permitiendo que un rival haga el partido más ruín y antideportivo que hemos visto en mucho tiempo. Me hace gracia recordar como condenaban al Athletic por jugarle al Madrid con sus mismas reglas. Pero ahora no ha pasado nada...era un golpe y derribo anunciado. Y lo dicho al principio, para los que aun seais nuevos en la materia o un poco ilusos: Asistimos a un capítulo escrito, y sólo la sorpresa puede evitar que den el golpe canalla que vienen tejiendo.

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