El Real Madrid, como parte de su campaña antideportiva para llevarse algún título, no concederá ni una sola entrada a los aficionados del Barcelona en la ida de la final de Supercopa (14 de Agosto) en el estadio de nombre fascista. Suponen que privando al Barcelona del apoyo de su afición podrán influenciar un poco más en lo que rodea al juego, ya que en el juego están perdidos.









1 comentario:
Pero que detestables que son.Ya comienzan los ataques contra los culés de forma alevosa y unilateral.Ya no esconden sus intenciones, esta temporada va a ver mucho más crispación y juego sucio que en la anterior, pero con diferencia.
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