Desde el 1-0 en el Camp Nou, la táctica del madridismo fué cerrar filas en torno al proyecto Florentiniano. Las voces que antes clamaban contra Pellegrini callaron subitamente, donde "dije digo ahora digo diego". En otros tiempos, una derrota de cualquier tamaño contra los culés era motivo para pedir la cabeza de todo el mundo, pero sabían que esa opción no les era posible ahora...porque después de haberse entrampado, de haber fundido las arcas del madrid, obligar a salir al presidente actual y a los suyos supondría una bancarrota. Bueno, realmente no habría bancarrota, porque como todos sabeis en este pais harían cualquier escándalo para evitarlo ( valgan como prueba estos préstamos millonarios recientes en época de crisis para combatir el triplete, luego sextete).
Pero habría sido una papeleta dificil y extrema sacar al madrid de algo asi, con un consecuente despertar aun mayor del odio que los demás clubes les profesan. Así que, como venia diciendo, cerraron filas. Dieron por válido el resultado, y lo vendieron como un síntoma de mejoría (mentalidad perdedora, por cierto) al no haber sido goleados ni apalizados.
Ahora, tras la caida en San Mamés, el madridismo se encuentra impotente. Ni el arbitraje más descarado desde hace casi un año les ha valido para robarle a los vascos el resultado. Aparte de eso, los encuentros contra grandes rivales son su gran caballo de batalla, porque donde el factor arbitraje no lo puede todo, les resulta imposible marcar la diferencia.
Desde esta derrota, inicialmente hubo otra intentona de evitar hablar del Madrid, mirando para otro lado, comenzando a elogiar al Barcelona (desconfiad cuando oigais que algún medio habla bien de los culés)...pero todo es frustración, como aquel bigote blanco que aplaudía desde las gradas a ronaldinho para castigar a los suyos. Ni han sido ni serán jamás reconocedores del buen fútbol ni del rival (como dijo bién Abel Resino, "el Barcelona tiene otra filosofía, la de ganar y jugar bien, el Madrid sólo la de ganar"....y como consecuencia sus seguidores también, de lo contrario se cambiarian de equipo).
En definitiva, lo que venía a decir es que al intento inicial de mantener ese silencio se han sucedido otras incipientes voces críticas que vuelven a despertar del letargo. Hablan de Pellegrini, hablan de Marcelo, hablan de Diarrá...y se anuncia el comienzo de otra gloriosa época autodestructiva en el Madrid. Gracias Barça.
Pero habría sido una papeleta dificil y extrema sacar al madrid de algo asi, con un consecuente despertar aun mayor del odio que los demás clubes les profesan. Así que, como venia diciendo, cerraron filas. Dieron por válido el resultado, y lo vendieron como un síntoma de mejoría (mentalidad perdedora, por cierto) al no haber sido goleados ni apalizados.
Ahora, tras la caida en San Mamés, el madridismo se encuentra impotente. Ni el arbitraje más descarado desde hace casi un año les ha valido para robarle a los vascos el resultado. Aparte de eso, los encuentros contra grandes rivales son su gran caballo de batalla, porque donde el factor arbitraje no lo puede todo, les resulta imposible marcar la diferencia.
Desde esta derrota, inicialmente hubo otra intentona de evitar hablar del Madrid, mirando para otro lado, comenzando a elogiar al Barcelona (desconfiad cuando oigais que algún medio habla bien de los culés)...pero todo es frustración, como aquel bigote blanco que aplaudía desde las gradas a ronaldinho para castigar a los suyos. Ni han sido ni serán jamás reconocedores del buen fútbol ni del rival (como dijo bién Abel Resino, "el Barcelona tiene otra filosofía, la de ganar y jugar bien, el Madrid sólo la de ganar"....y como consecuencia sus seguidores también, de lo contrario se cambiarian de equipo).
En definitiva, lo que venía a decir es que al intento inicial de mantener ese silencio se han sucedido otras incipientes voces críticas que vuelven a despertar del letargo. Hablan de Pellegrini, hablan de Marcelo, hablan de Diarrá...y se anuncia el comienzo de otra gloriosa época autodestructiva en el Madrid. Gracias Barça.
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