La campaña

Se sigue cumpliendo todo lo que se vaticina en este blog. No es una cuestión de presumir, más bien resulta triste comprobar que esta todo tan amañado. Hace poco escribí aquí que la tanda de penaltis pitados en contra del Madrid en dos encuentros, era solo una forma de contrarrestar las cifras con penas máximas en contra del Madrid, en momentos poco relevantes del partido, para tener más margen a la hora de seguir señalando penaltis a favor. Hoy mismo han vuelto a sumar uno más a las cifras del Madrid (en el 3-0), que sigue batiendo records con 5. ¿Alguien pensaba que se detendría el chorreo?.

Por otra parte, escribí también que en los encuentros donde el Madrid tiene solucionada la papeleta, como hoy, el tiempo de descuento siempre es de 3 minutos o menos. Ha sido de dos.

 

Os estaréis dando cuenta de la brutal campaña mediática destinada a otorgar el balón de oro a Cristiano Ronaldo. Para ello cuentan con una triple línea de actuación. En primer lugar, desacreditar al principal obstáculo, Leo Messi, con la cuestión tributaria y posteriormente magnificando su situación baja de juego actual. El segundo frente es Blatter, que con unas palabras en una Universidad les ha dado tela para tejer cientos de trajes. Lo plantean como una cuestión personal de la cual Blatter tendrá que salir demostrando su no animadversión hacia Cristiano, y eso pasa por un balón de Oro. En tercer lugar, inflar las cifras y el juego de Cristiano Ronaldo. A su golaveraje presente hay que considerar que se suman 5 goles de penalti. Solo uno en el caso de Messi.

Las declaraciones post partido de Cristiano en el encuentro frente a la Real parecían de chiste. Estaba irreconocible, hablando de "el equipo", y recurriendo al disfraz de jugador humilde y compañero. Este mismo individuo que se señala el muslo o se golpea el pecho tras marcar un gol, y últimamente señala al campo como diciendo "yo estoy aquí". Pero debe tener unos asesores al tanto de la campaña y de los puntos clave para dibujar un panorama propicio al balón de oro.

El jugador luso, en el caso de ser una persona digna, veraz y consecuente, debió renunciar a sus opciones a balón de oro. En teoría él se cree a rajatabla que las cosas están amañadas, y una "persona" con todas las letras se borra de competiciones o selecciones amañadas. Sin embargo Cristiano no se borra, y lejos de hacerlo se ha iniciado una campaña para darle el trofeo. Eso es más propio de personas que consideran que ninguna competición es justa sino que es cuestión de la "fuerza" que se haga. Creo que me entendéis perfectamente. Es un sentir merenguista que compartían Mourinho, Florentino y Cristiano, y como parte fundamental del ADN madridista les hizo casar perfectamente con el sentir de la afición. Los valores deportivos sin embargo son otra cosa.